Luego, ya nos hemos metido en el partido. En el último tramo de la primera parte, la verdad, es que hemos estado muy bien.
Ha tenido que ser en la segunda parte, una genialidad de Rotellar, ha marcado de una falta directa. Y ahí nos hemos metido en el partido con el dos a uno para poder pelearlo.
La sensación en la segunda parte era totalmente contraria a la primera. Era de muchísima solvencia, de estar muy cerca del dos a dos.
Pero, la primera contra que han tenido, Casaus que ha salido de refresco, nos ha ganado la espalda y no ha perdonado.
Es que cuando juegas con un equipo de play-off el nivel de efectividad. Ellos han tenido tres ocasiones y han metido las tres, nosotros hemos tenido cuatro –en la segunda parte hemos tenido un balón al palo de Horno, una también de Ginés- y no hemos marcado ninguna.
Esta es la diferencia y tenemos que tener claro que los próximos partidos en casa, tanto Monzón como Cariñena, son dos partidos claves para nosotros.